Psiquiatría social

De alguna manera tenía que sacar toda esta rabia contenida tras oír una y mil veces lo que al parecer mucha gente piensa sobre los psiquiatras.

A todos ellos les digo, en modo Ortega Cano;

'DÉJAME EN PAZ, DÉJAME VIVIR'

(sígase mentalmente de diez minutos de risa desenfrenada.)

Y ya de paso, qué bien viene el vídeo para decírselo también a Mariano. Con sus recortes y sus políticas sociales, está favoreciendo mucho la demanda de psiquiatras; recuerdo mis prácticas en un Centro de Salud Mental como una sucesión de personas desempleadas cuya situación les lleva a lidiar con el insomnio, los ataques de ansiedad, los síntomas depresivos. ¿El tratamiento de esta gente son pastillas?, ¿es terapia? No, señor, es un trabajo.

Y nosotros estamos atados de piés y manos, sujetos también a los recortes presupuestarios de un Sistema Sanitario que intentan privatizar poco a poco. Muchos compañeros se dan de morros con el paro tras años de intensa formación, otros tantos emigran al extranjero en busca de un contrato laboral digno (la mayoría de los contratos españoles para médicos son de tres meses en tres meses hasta que el hospital te eche, y mucha gente subsiste a base de trabajar sólo en guardias y sustituciones.)

A las personas que, desesperadas, acudan a los Centros de Salud Mental en los que pronto iré a formarme como psiquiatra espero al menos poder ayudarlas a paliar algunos de esos síntomas. Espero también que el hecho de saber 'que no están locos' y que están reaccionando de manera normal ante la situación con la que lidian, les de cierta tranquilidad en lo que a su salud respecta.

La verdad es que los psiquiatras a los que acompañé en estas consultas estaban hartos de este tipo de casos, ya que realmente no existe enfermedad mental alguna, y por tanto o no les interesa o se sienten demasiado inútiles al no poder hacer gran cosa para atacar la raíz de los males de esa persona.

Yo misma odié en su día este tipo de consultas, pensaba que me hacían perder el tiempo ya que lo que todo apasionado de la Psiquiatría ansía ver son casos complicadísimos de esquizofrenia (¡a poder ser hebefrénica, o ya puestos catatónica, que es la más rara!), despersonalización, depresión mayor con síntomas psicóticos, fases maníacas hiperagudas del trastorno bipolar, un síndrome de Münchhausen por poderes o un síndrome de Cotard...

En fín, todas esas cosas que uno ha estudiado en los libros con grandísima emoción, y que se encuentran en las consultas reales sólo de vez en cuando. Como todos los médicos, somos apasionados de los casos raros y complejos, pero en el día a día de un psiquiatra esos aparecen poco.

Y yo ahora lo veo con otros ojos. Quizás me guste demasiado el trato con el paciente en sí. Si puedo ayudar a gente que lo está pasando mal, por más que no sean enfermos psiquiátricos sino personas con una salud mental perfectamente normal, pues bienvenido sea. Poca cosa podré hacer para mejorar la situación de desempleo de esa persona, pero al fín y al cabo seré una experta en dar consejos contra el insomnio, la ansiedad, la angustia... y quizás incluso aprenda bastante Psicología y sepa enseñarles de alguna manera a adoptar la mejor postura contra su situación personal.

No, no recetamos antidepresivos a este tipo de personas. Al menos, no lo harás si no eres un psiquiatra corrupto y si los síntomas son leves y adaptativos. Si bien es cierto que algunas de estas personas pueden desarrollar una depresión mayor, muy grave y muchas veces con peligrosidad suicida... y en estos casos veo muy lógico que se utilice una medicación que les puede ayudar.

La enfermedad mental tiene sus causas genéticas -muy marcadas, por ejemplo, en el trastorno bipolar- pero también ambientales. Por eso es tan compleja, no sabemos dónde empieza la rueda. Y este país está incubando mucha enfermedad mental.

Se estima que la primera causa de discapacidad en el año 2020 será la depresión. Algo estamos haciendo mal en esta sociedad estresora que causa tanto daño a la felicidad de las personas.

Y como dijo una de mis profesoras: 'el médico siempre ha sido ese gran padre de todo el mundo', idea que me parece fantástica. Que la gente no dude en pedirme ayuda, aunque sea más paternal que médica.